La mayoría de las personas pueden comer gran cantidad de alimentos sin ningún tipo de problema, pero si es cierto que de un tiempo a ésta parte cada vez son más los casos de personas que sufren de algún tipo de alergia e intolerancia alimentaria.
En mi caso particular os podría comentar que yo soy intolerante a la lactosa y a la levadura química (la que se utiliza para hacer el pan, bollería industrial, galletas etc..), una de mis hijas tuvo alergia al huevo heredada por parte de su padre que con 34 años le detectaron después de un brote fuerte de dermatitis atópica, alergia al huevo, lo peor de las alergias alimentarias en adultos es que en raras ocasiones se supera, por suerte mi hija a los cuatro años consiguió superar su alergia.
Cuando las alergias aparecen en niños menores de seis años, por regla general se superan, en el caso de mi hija acudimos al departamento de alergología del hospital Infanta Sofía de Madrid, al que pertenecemos y gracias a unas pruebas de provocación al alimento que le realizaron superó su alergia.
Ésas pruebas de provocación consisten básicamente en la introducción del alimento que provoca la alergia en pequeñas cantidades y siempre bajo la supervisión del médico especialista que en todo momento está pendiente de que no se produzca ningún tipo de reacción adversa.
En el caso del huevo en concreto comienzan por la introducción de un bollo o dulce que contenga huevo, otro día algo empanado o rebozado, otro huevo duro, al siguiente tortilla, y finalmente les introducen clara líquida pasteurizada, que es lo que más reacciones provoca porque aparece la proteina del huevo sin alterar y es lo que más alergia provoca, las cantidades te las administran ellos y tienes que estar en observación unas horas hasta que comprueben que no has reaccionado mal a la ingesta.
La diferencia entre una intolerancia alimentaria y una alergia es que la alergia activa el sistema inmunitario y eso provoca la creación de anticuerpos y dichos anticuerpos segregan sustancias químicas como la histamina, que produce varios síntomas, picor, tos, moqueo, transtornos respiratorios etc.. Normalmente la alergia a los alimentos se heredan.
Sin embargo la intolerancia alimentaria afecta al metabolismo, no al sistema inmunológico, por ejemplo en el caso de la lactosa, la personas que la padecemos es porque carecemos de una enzima digestiva llamada lactasa que es la responsable de descomponer el azúcar de la leche.
La alergia aparece cuando el sistema inmunológico no funciona bien, y percibe una sustancia inocua como si fuera una amenaza, y lo ataca con las defensas inmunológicas del cuerpo. Normalmente éstas alergias son leves, pero hay personas que experimentan una reacción grave con peligro de muerte.
El promedio de las alergias alimentarias es del 1-2% en la población adulta, y la prevalencia es mayor en los niños pequeños que aumenta al 3-7%, pero afortunadamente entre el 80 y el 90% superan éstas alergias alrededor de los tres años, y las alergias que más fácilmente desaparecen son al huevo y a la leche.
Las alergias a frutos secos, legumbres, pescados, y marisco, pueden llegar a no desparecer nunca.
2 comentarios:
Buenas.
Muchas gracias por la informacion. me ha ayudado mucho.
PABLO
Muchas gracias a ti, Pablo, me alegro que te haya ayudado en algo, contando nuestras experiencias, nos ayudamos entre nosotros.
Un saludo.
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